COMER LO QUE TE GUSTA, ¡ES SANO!
Vivimos en una época dónde los cánones de belleza marcados por la sociedad y la importancia de la propia imagen nos impregnan de publicidad con modelos muy atractivos y cuerpos modélicos, que algunas veces son extremadamente delgados. En la misma época nos encontramos con un porcentaje récord de sobrepeso y obesidad en la población general.
Esa dicotomía nos demuestra que los humanos somos, generalmente, seres de extremos. Cuándo hacemos o pensamos alguna cosa, somos blanco o negro, bueno o malo, que es serio o es divertido, y así con todo.
Posiblemente esa visón puede ser fruto de la educación que hemos recibido, pero eso no tiene que ser excusa. Una cosa es muy clara, cuándo nos acercamos a los extremos, normalmente disminuye nuestro nivel de felicidad porqué llegamos a situaciones extremas que nos llevan a conductas obsesivas.
En realidad no todo es blanco o negro, es aquí dónde cada uno tiene que encontrar su propia tonalidad de gris.
A las personas con tendencia al sobrepeso, les aconsejo que se lean el “El Peso Deseado en 11 Pasos”. De esa forma, podrán recuperar su peso deseado y disminuirán el riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes sin necesidad de seguir estrictas dietas aburridas.
A las personas muy rigurosas en seguir perfectas dietas, sin descuidar ni un pequeño detalle, ni saltarse un día del gimnasio. Me gustaría que se preguntaran…¿Cuánto hace que no comen lo que les apetece?, y si lo hacen, ¿cómo se sienten?
Si la respuesta es mucho tiempo, podría tener la ligera sensación de que están dejando de ser ellas, de disfrutar y sentirse auténtico. No es bueno encarcelarse en unos menús cuadriculados, y unos horarios intensivos de gimnasio, que lo único que conseguirán es angustiarnos y crearnos dependencia e infelicidad.
Tanto en un extremo, cómo en el otro, me gustaría dar el mismo consejo: ¡come lo que te gusta! Cómelo con la frecuencia adecuada, pero cómelo. Con amigos, con familia, sólo, pero escucha tus deseos y complácelos de vez en cuando.
El secreto reside en el equilibrio. ¡Encuentra el tuyo!.